Busca que las empresas europeas ganen terreno en sectores clave
Agencias/Elapogeoqroo
Bruselas, Bélgica, 27 de mayo de 2024. La Unión Europea ha dado este lunes su aprobación definitiva a la Ley de Industrias de Emisiones Cero, una medida diseñada para fomentar la producción de tecnologías limpias en Europa y competir con las industrias subsidiadas de China y Estados Unidos. La nueva normativa busca que, para 2030, la UE pueda cubrir el 40% de su consumo de tecnologías limpias con producción propia y que, para 2040, Europa sea responsable del 15% de la producción mundial en este sector.
Entre las principales medidas de la ley se incluyen la aceleración en la obtención de permisos, la modificación de normas sobre licitaciones públicas para favorecer ofertas más sostenibles, la facilitación del acceso a mercados y la mejora en la formación de trabajadores especializados en estas tecnologías. La legislación se centra en tecnologías estratégicas como energía solar, eólica, baterías, tecnologías de almacenamiento, bombas de calor, geotérmica, electrolizadores, células de combustible, biogás y biometano sostenibles, captura de carbono y redes energéticas. Además, se han añadido combustibles alternativos y tecnologías de fisión y fusión nuclear.
El ministro de Economía de Flandes, Jo Burns, destacó que esta ley ayudará a Europa a liderar la carrera global en tecnologías limpias, reduciendo dependencias y creando crecimiento y empleo en la región. La normativa también incluye un objetivo de captura de carbono de al menos 50 millones de toneladas de CO2 anuales para 2030, y establece plazos más cortos para la concesión de permisos de construcción o ampliación de fábricas de tecnologías de emisiones cero.
La ley responde a los 340,000 millones de euros en subvenciones "verdes" aprobadas por Estados Unidos y a las inversiones previstas por China y Japón, de 260,000 y 140,000 millones de euros, respectivamente. En cuanto a licitaciones públicas, se requerirá que los adjudicatarios contribuyan a la sostenibilidad medioambiental y, en caso de alta dependencia de un país extranjero, a la resiliencia de la UE. Se prevé, además, la creación de academias para formar a 100,000 trabajadores en estas tecnologías en los próximos tres años.
0 Comentarios