Se cataloga como un hecho histórico en defensa de la educación
Agencias/Elapogeoqroo
Buenos Aires, Argentina, 24 de abril de 2024. El martes por la noche, cientos de miles de personas se congregaron en las calles de Buenos Aires para expresar su apoyo a la universidad pública y protestar contra la falta de financiamiento por parte del Gobierno de Javier Milei, en lo que se ha convertido en la mayor movilización en su contra hasta la fecha.
La manifestación, que contó con la presencia de partidos políticos opositores, sindicatos y organizaciones sociales, culminó en la Plaza de Mayo frente a la Casa Rosada, sede del Gobierno. Aunque la Policía estimó en 150 mil los asistentes, los organizadores aseguraron que superaron el medio millón de personas. Además de Buenos Aires, ciudades como Córdoba y Mendoza también fueron escenario de protestas masivas.
Las movilizaciones fueron convocadas por el Consejo Interuniversitario, el Frente Sindical de Universidades Nacionales y la Federación Universitaria Argentina, quienes denunciaron el bajo financiamiento de las instituciones educativas. Señalaron que el presupuesto asignado no ha sido actualizado a la inflación, lo que ha afectado el funcionamiento de las universidades.
La Universidad de Buenos Aires (UBA), una institución gratuita de renombre internacional, ha sido una de las más afectadas por los recortes presupuestarios. A pesar de registrar una inflación del 287.9% en el último año, el Gobierno prácticamente congeló su financiamiento, lo que ha afectado la calidad de la enseñanza, la investigación y la atención sanitaria en la institución.
El presidente de la Federación Universitaria Argentina, Piera Fernández, destacó la importancia de la inversión en educación y la defensa de la universidad pública como un pilar fundamental para el desarrollo del país. Por su parte, la UBA denunció que el recorte presupuestario ha provocado una disminución significativa en sus actividades académicas y administrativas.
Las manifestaciones se producen en un contexto de tensión política, en el que el Gobierno de Milei ha promovido recortes en el gasto público, incluido el presupuesto destinado a la educación. Sin embargo, la universidad pública y gratuita es altamente valorada por los argentinos, quienes expresaron su apoyo en las calles con consignas en defensa de la educación y la ciencia.
A pesar de los esfuerzos del Gobierno por limitar el alcance de la protesta, la manifestación concluyó con un contundente respaldo a la universidad pública y un llamado a preservar su financiamiento para garantizar el acceso a la educación superior en Argentina.
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